El Pulpo habló luego de que se le escape la victoria al Millonario en Uruguay y realizó una fuerte autocrítica.
Por la cuarta jornada del Grupo H de la Copa CONMEBOL Libertadores, este martes por la noche River igualó 2 a 2 ante Nacional de Uruguay en el Estadio Gran Parque Central y desperdició la chance de pasar de ronda, como también de clasificarse al Mundial de Clubes 2025.
Más allá de haber sumado un punto en una cancha difícil, y ante un pesado del continente como lo es Nacional de Uruguay, por cómo se dio el trámite del encuentro pareciera que el Más Grande se vuelve a la Argentina con las manos vacías.
Lo cierto es que el conjunto de Martín Demichelis se encontró dos tantos arriba frente al Bolso y contó con un contexto muy favorable para liquidar la historia. Sin embargo, se terminó durmiendo en los laureles y lo pagó caro. Los comandados por Álvaro Recoba reaccionaron a tiempo y rescataron un empate 2-2 que los deja vivos en el certamen continental.
En ese contexto, una vez finalizado el encuentro, Franco Armani, que fue de mayor a menor en el partido y que protagonizó una falla realmente evidente que derivó en el empate definitivo del Bolso, habló con los medios tras la igualdad en Montevideo y evidenció su malestar por el resultado.
“Nos vamos con un poco de bronca porque teníamos el resultado arriba de dos goles, nos empatan en el segundo tiempo. Pero bueno, como siempre digo, cuando pasó también con Talleres, que nos empataron, todo tiene que servir de aprendizaje”, comenzó diciendo el capitán de la Banda.
“Obviamente es Copa Libertadores, si te dormís en los pequeños detalles te los hacen pagar, pero bueno, a seguir. Lo importante, lo rescatable también, es que no se perdió, que sumamos. Y bueno, estamos bien ubicados en la tabla. A seguir trabajando, obviamente a seguir corrigiendo errores porque los goles son por pequeños detalles”, profundizó.
Por último, al ser consultado sobre polémico arbitraje de Anderson Daronco, quien no expulsó a Leandro Lozano por un planchazo a Rodrigo Aliendro y tampoco a Franco Romero tras pegarle una trompada en la cara a Paulo Díaz, el arquero de River evitó cualquier polémica.
“No me gusta hablar mucho del árbitro. No soy de meterme mucho en ese tema. Eso queda de lado”, manifestó. A pesar de ello, sobre el cierre de la nota disparó: “Por ahí las chiquitas fueron para el local…”.
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