El entrenador más laureado de la historia del Millonario cumple 48 años, y para celebrarlo rememoramos sus mejores recuerdos en el club.
Tricampeón y directo al altar
El 21 de diciembre de 1997 es un día recordado en la historia del Millo, y más aún para el Muñeco. Alrededor de las 21 estaba festejando en la cancha de Vélez el Apertura, que nombraría a River como el Tricampeón del Fútbol Argentino, y a las 23:30, le dio el "Sí" a Geraldine La Rosa, la mujer que lo acompañaría toda su vida. Con los botines puestos, el 10 salió volando del estadio hacia la parroquia, para contraer matrimonio y cerrar un domingo que nunca olvidará.
El debut con el Manto Sagrado
El 26 de marzo de 1993, con 17 años cumplidos apenas dos meses atrás, el Muñe tuvo su estreno en el Monumental, nada más ni nada menos que por Copa Libertadores, frente a Olimpia de Paraguay. El resto, es historia. Con el Millonario ya eliminado en la fase de grupos, el por aquel entonces entrenador de La Banda, Daniel Passarella, decidió que era el momento adecuado para que el joven enganche tenga sus primeros minutos en la Primera de River.
Libertadores 1996, la primera de las tres
El primer título internacional del Muñe llegaría tres años después de su debut: el 26 de junio de 1996, el Más Grande consiguió la segunda Libertadores de su historia, de la mano de Ramón Díaz, ante un Monumental repleto de hinchas. Aquella noche, un joven Hernán Crespo convirtió el doblete que le dio la Copa a River. En ese equipo lleno de figuras se encontraba un Gallardo que, aunque no fue titular en la final, era un pilar en la distribución del juego.
El vérdugo de Boca
Si de la Era Gallardo se habla, lo primero que se viene a la cabeza son las eliminaciones al clásico rival, desde la primera, en la Sudamericana 2014, hasta la última, en las semis de la Libertadores 2019. En sus ocho años al mando del plantel, Napoleón eliminó cinco veces seguidas a los de La Ribera, dejando el historial de los "mano a mano" con una diferencia a favor para La Banda, de 13 a 7. Las cinco eliminaciones al hilo del River de Gallardo a Boca:
El primer mano a mano con Gallardo como D.T. fue en las semifinales de la Sudamericana 2014. En la ida igualaron 0-0, en un partido en el que los de Núñez rasparon y metieron en cada pelota. En la vuelta, disputada en el Monumental, Barovero se metió en la historia grande del club con un penal atajado a Gigliotti a los 5', y luego Pisculichi metería un zurdazo que venció a Orión y selló el 1-0 con el que River pasaría a la final.
Al año siguiente, apenas seis meses más tarde, River volvería a eliminar a Boca, esta vez en los octavos de la Copa Libertadores. Tras el 1-0 en la ida con gol de Carlos Sánchez, en la vuelta se vivió uno de los episodios más recordados del fútbol argentino, cuándo los futbolistas del Millo fueron atacados con gas pimienta en la manga, al regreso del entretiempo. El partido fue suspendido, La Banda pasó a cuartos y terminó siendo el campeón.
Tres años tuvieron que pasar para un nuevo mata-mata, esta vez por la final de la Supercopa Argentina , el 14 de marzo de 2018. En Mendoza, el equipo del Muñeco venció por 2-0 al rival de toda la vida, con goles del Pity Martínez y de Nacho Scocco, quedándose con el trofeo. En la conferencia de prensa, Gallardo declaró en tono de chiste que jugar mal los meses anteriores fue parte de la estrategia para que Boca no sepa como jugaba River, quedando en el recuerdo de los hinchas millonarios.
La gloria eterna
No hace falta aclarar cuál fue el cruce más importante entre ambos clubes. En 2018, los dos llegaron a la final de la Libertadores, marcando un hecho histórico, que seguramente no se repita por muchísimos años. El 11 de noviembre se jugó la ida en La Bombonera, fue empate 2-2, y todo se definiría en la cancha de River. Lamentablemente, un violento episodio ocurrió el 24 de noviembre en las afueras del Monumental, cuándo un grupo de hinchas atacó al micro de Boca, lastimando a algunos jugadores rivales.
Tras varios días de incertidumbre, la final se pasó para el 9 de diciembre, en el estadio Santiago Bernabéu, de España. En aquella recordada fecha, River ganó por 3-1 el partido más importante de la historia, con goles de Lucas Pratto, Juanfer Quintero, y el Pity Martínez, consiguiendo la cuarta Libertadores y amargando una vez más a los xeneizes.
Pero como si no fuera suficiente haberles ganado dos finales en un año, se volvieron a cruzar en 2019, esta vez en las semis de la Libertadores. La ida, en el Monumental, fue un baile histórico de parte de los de Núñez, que se llevaron la victoria 2-0 con goles de Borré y Nacho Fernández, pasando por arriba al equipo de Alfaro. La vuelta, en cancha de Boca, fue victoria 1-0 para el local, con un vergonzoso arbitraje por parte de WiltonSampaio. De todas formas, el Millonario fue el que clasificó a la final, cerrando la quinta eliminación al hilo contra su clásico rival.
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