El delantero colombiano tiene una fundación en la que ayuda a más de 100 niños de su ciudad natal, Tierralta.
El Colibrí publicó una foto alentando a los chicos de su proyecto, la Fundación Miguel Ángel Borja, que preside desde 2014. La razón que lo llevó a crearla fue su dura infancia, en la que tuvo que trabajar haciendo mandados para sus vecinos, y así ganar dinero para poder ir a la escuela. El 9 del Millonario tiene un compromiso para brindarles ayuda psicológica, indumentaria y transporte, fomentando al deporte como un estilo de vida.
"El hambre me llevó a superarme", contó el goleador de La Banda, refiriéndose a su pasado, quién compró un terreno de cuatro hectáreas como inversión propia para llevar a cabo esta idea que salva la vida de familias de bajos recursos. El predio cuenta con tres canchas de fútbol en las que los chicos entrenan divididos en categorías, aunque a futuro su aspiración es ampliarlo.
El año pasado, el máximo artillero del conjunto de Núñez en la actual Copa de la Liga, organizó un amistoso entre Amigos de Borja y la Primera C de Tierralta, con el propósito de acercarle a las estrellas del fútbol profesional a la gente de su pueblo. Vistió a su equipo con la camiseta de El Más Grande y los hizo posar ante la cámara, cómo si fuera un partido por los puntos.
Es emocionante ver cómo chicos de todas las edades están horas jugando a la pelota y divirtiéndose en el predio, en vez de estar en la calle y pasando condiciones de vida terribles. El atacante sabe la ilusión que le genera a cada uno de estos jóvenes, que los motiva a seguir luchando cada día por salir adelante, y a encontrar en el deporte una solución a aquellos problemas sociales que surgen.
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