El Millonario acumula dos partidos consecutivos sin anotar goles. El último antecedente de una marca así se presentó dos años atrás.

El River de Marcelo Gallardo se ha caracterizado siempre por su poderío ofensivo. A lo largo de su mandato, el técnico priorizó la búsqueda del arco de enfrente por sobre la protección de su propia valla. En tal sentido, esta temporada no fue la excepción: La Banda es, junto con Palmeiras, el equipo más goleador de la Copa Libertadores. De todas maneras, el conjunto dirigido por Napoleón dejó la sensación de que generaba mucho más de lo que concretaba.

De esta manera, la falta de efectividad ante el arco rival se combinó con la poca fortuna y el Millo lo terminó pagando caro. Frente al conjunto brasileño, el duelo comenzó con varias situaciones claras para los dirigidos por el Muñeco pero, como dice el refrán, “los goles que no se hacen en un arco se reciben en el propio”. Y así fue, le marcaron tres. Contra el Rojo, los de Núñez dilapidaron muchas oportunidades y finalizaron 2 a 0 en contra. Así, sumaron dos encuentros consecutivos sin convertir goles y, de esta manera, igualaron al antecedente de octubre de 2018.

Dos años atrás, en la primavera argentina, River cayó frente a Colón por 1 a 0, en Santa Fe, y fue derrotado por el mismo resultado en el Monumental ante Gremio, en un partido correspondiente a la ida de las semifinales de Copa Libertadores. Sí, casi idéntico. Ahora, el Millonario deberá romper la sequía en Brasil, frente al Verdão.

La curiosidad es que se necesitará de tres goles como mínimo para poder avanzar de instancia, por lo que será imprescindible gozar de una puntería precisa y el guiño del destino para que todas aquellas pelotas que no entraron en estos días, sí lo hagan este martes, a partir de las 21:30.

Será un encuentro lleno de emociones en el que el equipo argentino deberá romper con la racha lo antes posible para desbloquearse mentalmente.

La gente cree, y el mundo riverplatense también. Irá por la hazaña en una victoria que, de lograrla, se convertiría en una de las páginas más importantes del ciclo Napoleónico.