A pesar de la victoria por la Copa Libertadores, el conjunto de Gallardo perdió la posesión de pelota después de 33 duelos.

Práctico y efectivo. Esas fueron las principales virtudes de River en el triunfo ante los colombianos, que no generó demasiadas situaciones de peligro, pegó en los momentos justos y recuperó la contundencia que le faltó ante Fluminense y San Lorenzo. Si bien Gallardo destacó que la esencia de juego no cambia, el equipo lució distinto con tres centrales y se notó una particularidad poco habitual: por primera vez después de 33 partidos. River perdió en lo que respecta al control del balón.

El conjunto colombiano terminó 53% a 47% y ese dominio le cortó al Millonario una racha tremenda de casi siete meses (210 días). El 30 de septiembre del 2020, por la fase de grupos de la Copa Libertadores, le ganó 2 a 1 al San Pablo en Avellaneda y los brasileños tuvieron una posesión global de 56%. Desde esa fecha, a excepción de Rosario Central por la Copa de la Liga Profesional (50 a 50), el Millo había tenido más la pelota en los pies ante cada uno de los rivales.

Hay otro factor que indica que esta situación podría repetirse en los siguientes partidos y es que estamos dentro de un calendario muy apretado. El conjunto se Gallardo va a jugar 5 partidos en apenas dos semanas y hay que regular piernas, ya que será muy exigente para todos los equipos que juegan copa. No todo el tiempo podemos tener la misma intensidad.