El defensa habló en exclusiva con Olé y relató la vez que fue titular por Copa Libertadores, como consecuencia de un masivo contagio de coronavirus en el plantel millonario.
El partido ante Independiente Santa Fe en el Estadio Mâs Monumental, correspondiente a 5ta fecha del Grupo D de la Copa CONMEBOL Libertadores 2021, es uno de los encuentros más recordados de la Era Gallardo, no solo por el resultado, sino por la valentía que demostraron sus futbolistas.
A raíz de un masivo contagio de casos de COVID en el plantel, el Más Grande salió a jugar ante el conjunto colombiano con muchos juveniles y con Enzo Pérez de arquero, ya que tanto Franco Armani como Enrique Bologna no estaban disponibles para ese encuentro.
En ese contexto, uno de los jóvenes que le defendió el Manto Sagrado aquella noche fue Tomás Lecanda, que tenía 19 años y era una de las promesas del club. Tres años más tarde, el defensor central rememoró ese encuentro y sostuvo que, a pesar de que “las circunstancias no eran las mejores”, terminó siendo un “partido perfecto” porque pasaron a la historia.
“Se empezó a rumorear que podría debutar y me entró la locura. Yo jugaba mucho en Reserva y sentía que podía llegar el momento. Escuchaba que en los medios decían que podía llegar a jugar el Superclásico, pero Gallardo no me llamaba”, detalló sobre su debut ante Boca por la Copa de la Liga 2021.
Y agregó: “El partido era un domingo y me llamaron el sábado a las 3 de la tarde para jugar con Boca al otro día. Fue una locura, el contexto no era el deseado porque había chicos que la estaban pasando mal con el covid, pero para mí fue inolvidable”.
Con respecto al partido ante Independiente Santa Fe, el zaguero central surgido de la cantera del Millonario reveló que se ofreció para cubrir el arco ante la ausencia de un arquero, pero que el cuerpo técnico terminó inclinándose por Enzo Pérez ya que arrastraba una molestia muscular.
“Un par de días antes de jugar ese partido se me acerca Matías Biscay y me dice: “¿Tomi, vos atajás?”. Yo lo miré y le dije: "Sí, yo no tengo problema". A todo esto éramos 10 ó 12 jugadores entrenando, el resto estaba contagiado. Después me cayó la ficha de que podía llegar a debutar siendo arquero habiendo jugado toda la vida de central. De hecho, llegó a aparecer en la tele un buzo de arquero con mi apellido”, describió.
Y adhirió: “Enzo venía con una molestia muscular y estaba muy justo. Marcelo nos reunió a los que estábamos disponibles y nos dijo: “Muchachos tenemos que sacar esto adelante, pero antes que nada necesitamos un arquero". Inmediatamente, Enzo dijo: “Atajo yo””.
Por último, aseguró que el Muñeco estaba convencido de que iban a ganar ese partido. “Gallardo estaba 100% convencido de que íbamos a ganar y hacer historia. Nos dijo que iba a pasar todo lo que terminó pasando durante esos 90 minutos. Fue todo de él, nosotros no teníamos cambios y en un momento quería que fuéramos a buscar el partido, ja”.
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